Consejos y precauciones para lavar el pelo tras un trasplante capilar

El proceso postoperatorio que se inicia inmediatamente después del trasplante capilar, es un proceso imprescindible para asentar los resultados. Seguir las indicaciones del médico nos va a permitir proteger las unidades foliculares recién trasplantadas, evitando que un porcentaje alto de folículos se desprendan. Entre las recomendaciones generales, son fundamentales las que hacen referencia a lavar el pelo después de un trasplante, debido al impacto que puede tener sobre el pelo un lavado que resulte agresivo. Es importante utilizar productos específicos, y respetar los tiempos que indique el especialista capilar.

La importancia de seguir una rutina correcta

El cuidado del cabello incluye su lavado, este proceso protege la composición del cabello, sin embargo, los continuos lavados pueden desgastar ciertas zonas del cabello. En el caso del pelo recién trasplantado, el proceso de lavado puede resultar agresivo por diferentes causas.

El lavado del cabello se lleva a cabo por contacto, es decir, para un correcto lavado, debemos aplicar el champú y aclararlo mediante un masaje que, si es especialmente agresivo, puede debilitar el cabello. En el caso de una persona que se disponga a lavar el pelo después de un trasplante, el contacto que implica el lavado de cabello puede dañar una gran cantidad de folículos, si no se realiza con precaución.

Otro factor que pone en riesgo la composición del cabello son los productos habituales de lavado. Estos productos están formulados para cabellos asentados, pero si los utilizamos en cabello recién trasplantado, su composición puede resultar demasiado agresiva, y actuar de manera nociva sobre el folículo.

Por tanto, para personas que se hayan sometido recientemente a un trasplante de cabello y deseen proteger los folículos recientemente trasplantados, será necesario seguir una rutina de lavado capilar especial.

Fases de lavado del cabello tras un injerto

Después de la cirugía de implante de cabello, el médico debe asesorarte acerca de las pautas de lavado, a continuación, vamos a repasar las fases más importantes.

  • Dos días después de la operación: Tras los dos primeros días después del trasplante, será necesario aplicar un spray salino cada dos horas, exceptuando las horas de sueño. Lo que buscamos es que los grafts estén limpios. Respecto a la zona donante, debemos lavarla de manera muy cuidadosa, con las yemas de los dedos, con un champú de farmacia que contenga un PH adecuado.
  • Días 3-15: Desde el tercer día, y hasta la segunda semana después de la operación, es importante lavar la cabeza completa dos veces al día con un champú que disponga de un PH equilibrado. Los primeros días debemos hacerlo de manera suave, para aumentar la fricción durante los días posteriores. Nunca se deben usar las uñas durante el proceso de lavado.
  • De 15 días a 2 meses: Es importante seguir utilizando un champú de baja acidez durante este período, pasados los dos primeros meses tras el trasplante, podremos volver a utilizar el champú que utilizamos habitualmente, sin poner en peligro el folículo.

En términos generales, es importante que tras un trasplante, el paciente evite en lo posible la fricción especialmente agresiva, por ejemplo frotar con las uñas, y además, se debe evitar el uso de champús tradicionales, debido al efecto que puede causar su composición.

El primer lavado tras la operación

Para el primer lavado tras un trasplante de pelo lo importante es tener claro el proceso. Si llevamos a cabo el lavado correctamente, estaremos protegiendo el folículo recién trasplantado, y por tanto, la estabilidad del cabello.

  1. Es importante aplicar correctamente la loción previa. Para su aplicación, debemos hacer movimientos suaves, nada agresivos y utilizando las partes blandas de los dedos, es decir, las yemas, nunca las uñas.
  2. A continuación, aclaramos durante unos cinco minutos, con agua templada. También es muy importante evitar el uso de agua excesivamente caliente durante los primeros días tras el trasplante, el agua caliente va a resecar el cuero cabelludo, este exceso de sequedad va a resultar especialmente nocivo para el cabello trasplantado.
  3. Para el primer lavado, es necesario utilizar un champú especial aplicado suavemente. No debes arrastrar el champú para su aplicación o aclarado, al contrario, los movimientos deben ser suaves, sin forzar el cabello.
  4. Para mejorar el secado, se puede utilizar una gasa que absorba por completo la humedad. Si utilizas una gasa o similar, no debes hacer movimientos agresivos, sino pequeñas pulsaciones que eliminen los restos de humedad.
  5. Por último, es posible que tras los primeros lavados debas aplicar un antibiótico para evitar infecciones. Al igual que en los pasos anteriores, su aplicación debe ser directa, pero a base de movimientos suaves.

¿Cuándo puedo volver a lavar mi cabello con normalidad?

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